Aunque realmente parece que sea los dos meses después. He estado sin actualizar el blog desde el 15 de febrero, pero eso se va a acabar, como el frotar. Una vez pasado el evento del año, decido que es hora de volver al redil.
En otras ocasiones, hoy sería uno de los peores días del año, el día del gran bajón. Después de la intensa semana eurovisiva, después del intensísimo fin de semana del festival, llega la vuelta a la realidad. Pero como este año ha sido de todo menos intenso, tampoco es que tenga ese bajón encima. Este año lo he visto con un sanísimo punto de indiferencia, disfrutando del momento, pero sin obsesionarse con las 51 semanas que quedan por delante hasta el festival de Moscú. Antes, cuando acababa Eurovisión, empezaban los exámenes; ahora, cuando acaba Eurovisión empieza la temporada del buen tiempo (se retrasa unos días este año), la temporada de playa, y bueno... el siguiente evento del año: FOGUERES 2008, aunque estas también las viviré con un saludable deje de indiferencia. ¿Será cosa de la edad?
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