sábado, 17 de julio de 2010

Soledades

Fui a la playa para estar solo, pero me sentí como si estuviese en la Linea 1

Son poco más de las 12 del mediodía y acabo de venir de la playa. He conseguido levantarme pronto, y dándome toda la prisa del mundo he cogido mis bártulos y me he largado a mi cita semanal con el mar. Yo pensaba que siendo un sábado y no siendo ni siquiera las 8.30 de la mañana la playa estaría vacía....

Cual sería mi sorpresa que ni a esas horas consigo un poco de soledad. La playa de San Adrián ya contaba con un nutrido público que recibía los primeros rayos del sol. Eso sí, he conseguido un buen sitio, cosa que de haber llegado un par de horas más tarde me hubiese sido totalmente imposible.

Qué gusto es poder disfrutar del mar y del sol. Es algo que no podría compensar.

viernes, 16 de julio de 2010

De vuelta

Yo tengo una mejor pinta que este con mi camiseta de Piqué

Ya estoy de vuelta en Barcelona. La semana en Colonia ha pasado a una velocidad endiablada, quizá porque esta vez sí que tenía cosas que hacer, sobre todo por las tardes arrasando todas las tiendas de Playmobil que pude encontrar, que no fueron muchas.

Anoche estuvimos cenando de nuevo en el Zum Löwen. Yo ya me había llevado mi invitación de cena del Internship, pero aprovechando que a Mary Ânge le debían una, me apunté al carro. Eso que me pude llevar, hohoho.

El día en la oficina ha sido muy caótico. Ya tiene bemoles que justo el día que tengo prisa porque tengo que salir a las 14h para el aeropuerto ha sido el día de más trabajo. Hemos salido con casi tres cuartos de hora de retraso. A pesar de ello, y gracias a mis hábiles dotes de conductor de coche alquilado, hemos llegado al aeropuerto sin sobresaltos. He aprovechado para cambiarme la camiseta de MF05 por la de "La Roja" aprovechando que era el momento de volver a casa y reivindicar mis colores.

Ahora ya estoy de nuevo en casa y estoy totalmente agotado. El viaje de vuelta en taxi ha sido exasperante, y no porque el taxista haya hablado mucho (que no ha abierto la boca) ni por estar oyendo la COPE, pero sinceramente, tenía ganas de llegar. Ahora es momento de ir a dormir, por si mañana puedo madrugar e ir a la playa...

jueves, 15 de julio de 2010

Tormenta de verano

La tormenta a punto de descargar sobre la ciudad


Ayer por la tarde viví momentos angustiosos en el centro de Colonia. Aprovechamos la última tarde libre que tendríamos para hacer las últimas compras. Yo seguía buscando mis Playmobils por las tiendas de Colonia, aunque no había mucho donde escoger. Es cierto que estaban las novedades, pero hubiese preferido encontrar algo más propio de la Karstad o la Kaufhof, pero no era mi tarde.

Y así sin más, empezó a soplar un viento huracanado, y ya se sabe que cuando empieza el viento, la lluvia no tarda en llegar. No me equivocaba pues apenas unos momentos después el cielo se abrió y descargó con gusto sobre Colonia. Aunque intenté evitarlo acabé totalmente empapado de agua. Incluso tuve que escurrir la camiseta amarilla, que se me había ceñido al cuerpo de forma peligrosa y sugerente.


Si vas a Hooter's todas las camareras son así


No quería pasar unos días en Renania del Norte-Westfalia sin acercarme a mi ciudad favorita de la zona, Düsseldorf. Le tengo un cariño especial desde que me enviaron allí con la empresa en marzo de 2002. Fue la primera impresión que tuve de un entorno altamente profesional. También le guardo un enorme cariño por los buenos momentos vividos con la Saubí.... Ay, quién pudiera echar el tiempo atrás y aprender a disfrutar a tope de aquellos días.

Pero el pasado no vuelve, así que me tengo que conformar con volver de vez en cuando. Conseguí llevar el coche hasta el Alstadt y luego intenté ir a cenar al State Side, pero se ve que ya no está, o como siempre, no supe encontrarlo. Acabamos cenando en Hooter's que más americano no puede ser. Es un restaurante donde las camareras van ligeras de ropa y se hacen las sugerentes. Te escriben en un papel su nombre y tienes que llamarles por el nombre de pila cuando te atienden. Muy americano. La comida no estaba mal, por eso, aunque no es el State Side. Quizá en la próxima ocasión consiga encontrarlo.

miércoles, 14 de julio de 2010

Agua de Colonia

La catedral y el puente, la estampa típica de Köln

Aquí sigo, abandonado y desnutrido en el corazón de Renania del Norte-Westfalia. Bueno, ni una cosa ni la otra. Abandonado un poco en la oficina, pero por las tardes-noches la cosa mejora. Desnutrido, tampoco se puede decir... ayer estuvimos con Robert, un compañero de trabajo en un Biergarten y luego fuimos a cenar a un restaurante cubano. ¡Qué bella es Alemania en verano! Y qué diferente al invierno.

No tengo mucho tiempo para escribir en el blog, y tampoco para llevar a cabo todos los "proyectos" que me había traído de Barcelona, pero espero poder acabar al menos uno.

martes, 13 de julio de 2010

Emociones, momentos, sentimientos



El Empire State Building con los colores de la bandera española - el fútbol mueve montañas

Ha pasado un día, pero los sentimientos siguen a flor de piel. Lo más importante que le podía pasar al deporte español sucedió el domingo por la noche. Para un país tan futbolero, conquistar el Mundial es lo máximo a lo que se puede aspirar. Han pasado ochenta años, pero al final, nos hemos "subido al carro". A partir de ahora nada de mirar a otras selecciones con complejo de inferioridad - tenemos el mismo número de títulos que Inglaterra o Francia, y puede que en el futuro alguno más caiga. Esto es como la Copa Davis, se tardó en conseguirla, pero una vez destapado el frasco, cayeron otras tres más.

Como os comentaba, no pude ver el partido porque estaba volando hacia Colonia, aunque dudo también de que hubiese resistido verlo. Mi salud no está para según que momentos infartantes. Durante el vuelo, el piloto anunció un par de veces el resultado, pero se notaba que no estaba muy pendiente. Al aterrizar, llamada a casa, nos vamos a la prórroga, los SMS van llegando, todo el mundo está nervioso y preparándose para lo peor. Mientras esperamos a que salgan las maletas, un tenso silencio recorre la sala de embarque. De repente, un grito en el walkie de un segurata, España ha marcado un gol, no se sabe si estamos ya en los penalties. Resulta que no, don Andrés ha marcado un gol que puede valer un mundial. Vuelve el silencio, pasan los minutos. Llega un nuevo SMS, ¡somos campeones del mundo! Nos dirigimos a la oficina de alquiler de coches, encontramos un televisor. Empezamos a ver imágenes de la celebración de los jugadores. Se desata la locura. Todo el mundo me felicita porque llevo la camiseta de la selección española con el nombre de Piqué.

Lo he resumido de forma muy telegráfica, pero es que ahora que ha pasado ya un día lo veo todo como si fuera una película. El momento del vuelo transcurrió lentísimo. El silencio del móvil mientras se jugaba la prórroga era casi inaguantable. La sensación de alivio al final, indescriptible.

A todo esto, llevo ya un par de días en Colonia y de momento todo muy bien. Hace un calor tremendo que no se puede aguantar, pero lo sobrellevo con un ventilador, que aquí no hay aire acondicionado. Por las noches estoy saliendo bastante, ya que siempre hay planes, algunos más interesantes que otros. Sigo a la búsqueda y captura de Playmobiles, llevo ya unos cuantos, aunque no todos los que yo quisiera. Seguiré la caza...

lunes, 12 de julio de 2010

¡Campeones!


Casillas, levantando la copa de CAMPEONES DEL MUNDO!!!!!!!!!!!!!!!


La imagen del post de hoy lo dice todo.

domingo, 11 de julio de 2010

La gloria y la derrota o Camino de Soccer City


El Soccer City es el sitio donde hay que estar esta noche

La gloria o la derrota. Una de estas cosas espera a la selección española de fútbol. La otra, a la holandesa. Estas dos selecciones se enfrentan esta noche en la final del Mundial de Fútbol 2010.

Para España es toda una novedad haber llegado hasta esta ronda, sobre todo después de los continuos fracasos. Bien recuerdo los momentos tristes de 1994, 1998 y  2002. En 2006 estaba en la playa y no muy triste que digamos. Es un día para hacer historia, y para coronarse campeón por primera vez. Ahora que ya tengo mi camiseta de la selección española (finalmente me decidí por llevar el número 3 de Piqué), tienen que ganar para que yo pueda lucirla por todos lados. Con el orgullo de mi país, de mi selección, del deporte español. ¡Viva España! Que ahora se puede decir sin que suene mal.

Enfrente tenemos a los holandeses. Todos sabéis que para mí Holanda es un país muy especial y al que quiero mucho, pero esta noche son los enemigos a batir. Espero sinceramente que pierdan su tercera final.

Y mientras espero el momento, esta mañana he ido a la playa de San Adrián, a seguir manteniendo el morenito que he ido acumulando estos días. Ha habido cosas muy reseñables, pero ya sabéis que por aquí no las comento, jejeje. Eso me lo guardo, pero me gusta porque nuevamente estoy en la fase de donde pongo el ojo pongo... el puntero. :P

Quedan ya sólo momentos... para irme a Colonia a trabajar la semana que viene. Ya tiene valor que justo este domingo que puede ser histórico, me tenga que ir en un vuelo justo a la hora del partido, y no sabré el resultado hasta aterrizar.