La Navidad ya de por sí es una época especial, llena de recuerdos. Según en la etapa vital en que te encuentres, pueden ser buenos, malos, nostálgicos, esperanzadores... De alguna manera todo el mundo considera la Navidad como una época especial. A pesar de todo, a mí aún me sigue gustando. Debo disfrutar de este sentimiento mientras dure.
Desde que recuerde, el 8 de diciembre ha marcado el inicio de la Navidad en casa. Era el día de decorar la casa, de poner el árbol y el belén, de dar una vuelta por las tiendas para ir preparando los regalos, y por supuesto, era el día en que mi abuela Pura cumplía años. Hoy hubiera cumplido 97 y seguro que hubiera sido una fiesta. Aunque en los últimos años de su vida ya no se hacían las celebraciones de antaño, por motivos varios, pero seguro que de haberlo celebrado hoy, todo sería distinto. Han cambiado mucho las cosas en la familia y aunque hace unos años todo parecía perdido, hoy ya parece todo mucho más en orden.
En 2016 ya no tenemos esa fiesta, aunque intentaré seguir las tradiciones que pueda, porque yo soy muy tradicional. :)
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