Un poco de aire pooooooor favooooooooooor
Parece mentira, pero es ahora al final del verano cuando más follón hay en mi trabajo por el tema de las vacaciones. Entre doblar turnos y otras turbulencias, estoy pasando de la mejor manera posible esta semana. No veo el momento de que llegue el viernes y con ello el asueto. Llego a casa tan agotado que no me apetece ponerme a escribir el blog, sólo quiero pillar una máscara de oxígeno y recuperarme un poco. Ni siquiera tengo fuerzas para leer el libro que tengo entre manos, De parte de la princesa muerta, de la escritora hindo-francesa Kenizé Mourad. Es una recomendación de Eva, ya os contaré qué tal. El principio no es muy prometedor, pero tampoco lo fue Millennium 2, y ya lo he acabado.
Entre otras cosas, aún sigo sin encontrar una tarjeta sim para mi nuevo módem G3. Hace ya unos días que lo tengo, aunque creo que no había comentado nada al respecto. El caso es que por fin he cambiado unos puntos de Perrafone. Por un lado para no perderlos, y por otro para tener por fin una manera de poder conectarme en Alicante cuando las noches de aburrimiento me alcancen el mes que viene. El caso es que todo pintaba bien, demasiado bien, hasta que no descubrí el truco que se guardaban bajo manga. Pero bueno, de todo se sale, y de esta encerrona de Perrafone también.
P.S: ¡Esta es la entrada nº 400 de mi blog!
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