Aquí os contaré cosas que me vayan pasando, mis pensamientos, mis vivencias... yo, en definitiva.
viernes, 14 de noviembre de 2008
Bailando
Bailar produce por lo general efectos positivos en aquél que realiza la acción. Es un excelente ejercicio para bajar peso, al tiempo que te diviertes. No hace falta más que recordar aquellas noches de 1998 en el Nepal, bajo la atenta mirada del calvo, donde cada noche perdíamos uno o dos kilos de esos bailoteos que nos pegábamos.
El caso es que a veces uno se emociona tanto bailando que se deja llevar demasiado. Esto le pasó el lunes 10 a Terelu Campos, quien nos ofreció un plano directo de su tetamen mientras evolucionaba sobre el escenario de Mira Quien Baila. Ella empezó muy bien su número de vals, pero cuando acabó la canción, más parecía que hubiésemos presenciado un número erótico. Aunque visto el material que nos enseñaba, más que una diosa del sexo, parecía Nomi Malone. O Sonia o Selena (nunca supe cuál era cuál) en aquél mítico sorteo extraordinario de la ONCE del 15 de agosto de 2001, donde nos dieron todo un repaso anatómico de cómo se comporta un chichi apretado bajo un pantalón de lycra rosa.
Y todo esto en la tele pública. ¡Qué vergüenza!
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